El juicio por el femicidio de Catalina Gutiérrez, la joven estudiante de arquitectura de la Universidad Nacional de Córdoba, previsto para comenzar este jueves 27 de febrero en la Cámara 11 del Crimen, fue suspendido y reprogramado. La decisión se debe a que el único imputado, Néstor Aguilar Soto, fue trasladado a un centro psicoasistencial para su estabilización.
Marcelo Gutiérrez, padre de la víctima, expresó su frustración y dolor ante esta postergación. «Estamos con mucha angustia, destruidos por la pérdida de nuestra hija y ahora debemos enfrentar estas demoras. Siempre hay artilugios de la defensa para dilatar el juicio», señaló en diálogo con VillaNos Radio.
Según lo informado por el fiscal, Aguilar Soto permanecerá internado durante 72 horas y, en función de su evolución, se determinará su regreso para la reanudación del juicio. En principio, la nueva fecha de inicio podría ser el próximo jueves, siempre y cuando una nueva pericia confirme que está en condiciones de enfrentar el proceso judicial.
Néstor Alejandro Aguilar Soto está imputado de homicidio calificado por alevosía y por violencia de género, en concurso ideal.
El tribunal que lo juzgará está integrado por los camaristas Horacio Augusto Carranza (presidente), Susana Frascaroli y María Gabriela Rojas Moresi, junto con jurados populares. En representación del Ministerio Público Fiscal, participará del debate el fiscal de Cámara, Marcelo Sicardi.
Gutiérrez también se refirió a la relación que su hija tenía con el acusado. «Era su amigo y compañero de facultad desde hacía tres años. Venía a casa, almorzaba con nosotros. Incluso nos daba tranquilidad saber que ella estaba acompañada por alguien de confianza. Jamás imaginamos que esto podía pasar», lamentó.
Respecto a las pruebas que sustentan la acusación contra Aguilar Soto, el padre de la joven se mostró confiado en el Poder Judicial. «Él mismo reconoció lo que hizo. Hay pruebas contundentes: cámaras, testigos, llamadas telefónicas. Solo queremos que se haga justicia y que le den la condena que corresponde, cadena perpetua por femicidio y alevosía», manifestó.

El femicidio ocurrió el 17 de julio de 2024, en la casa del acusado.
Consultado sobre la discusión en torno a la posible eliminación de la figura de femicidio del Código Penal, Gutiérrez evitó profundizar en el tema, aunque subrayó la importancia de que estos crímenes sean juzgados con la máxima rigurosidad. «Nuestro único objetivo es que se haga justicia por Catalina. Más allá de la calificación legal, queremos que este caso se resuelva y que el responsable reciba la pena que corresponde», enfatizó.
Mientras la familia de Catalina espera el inicio del juicio, continúan enfrentando el dolor de su pérdida y la incertidumbre ante posibles nuevas dilaciones. «Queremos cerrar esta etapa dolorosa y encontrar algo de paz. Esperamos que la semana que viene finalmente comience el juicio y que Catalina pueda descansar en paz«, concluyó su padre.