El exjuez federal y abogado constitucionalista Miguel Julio Rodríguez Villafañe brindó un crudo análisis jurídico sobre la sentencia de la Corte Suprema en la denominada Causa Vialidad, que involucra a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. El letrado no escatimó críticas al proceso judicial y lo calificó de “arbitrario”, “falaz” y parte de un entramado de “persecución política”.
“La sentencia es totalmente arbitraria, incluso hasta con hipocresía”, afirmó en diálogo con VillaNos Radio.
Desde su perspectiva, el proceso vulneró derechos fundamentales: “Cristina ya había sido juzgada. Violaron la cosa juzgada, no le permitieron defenderse adecuadamente ni presentar pruebas. Tampoco se hizo un análisis desde la legalidad: se la responsabiliza solo por ser presidenta”.
Villafañe también cuestionó que se hayan imputado 51 obras públicas pero que solo se auditaron tres, sin hallarse irregularidades. “Si hubiera habido anomalías, las empresas grandes que se presentaron a las licitaciones hubieran impugnado. Eso nunca ocurrió. Eso habla de que la causa no tenía sustento técnico”.
En un tono cada vez más crítico, el constitucionalista vinculó la sentencia con una lógica de persecución política. “Hay un ensañamiento con una expresidenta y con una mujer. Mientras tanto, a Macri no lo embargan por el caso Correo ni por el parque eólico. Milei está sospechado internacionalmente por la criptomoneda Libra. Sin embargo, la única que ha atacado el Estado de Derecho, según esta justicia, es Cristina”.
Asimismo, denunció que la sentencia impone una multa de 85.000 millones de pesos “calculada de forma arbitraria” y lo contrastó con la falta de sanciones patrimoniales a otros actores políticos. “Estamos viviendo la muerte del Estado de Derecho. Con este criterio, todos estamos en libertad condicional”, sentenció.
Rodríguez Villafañe apuntó directamente contra la Corte Suprema, actualmente con tres miembros activos. “Los tres han sido acusados por la Cámara de Diputados. Están peleados entre ellos y, aun así, deciden el destino institucional del país. La solución es clara: hay que descabezar esta Corte mediante juicio político y nombrar una nueva”.
En esa línea, propuso utilizar el mecanismo jurídico de la acción revocatoria de cosa juzgada írrita. “La sentencia es nula, inválida. Hay mecanismos institucionales para revertir esta situación, pero hay que tener decisión política y presión social. Si no, nada cambia”, remarcó.
También fustigó al presidente Javier Milei por su concentración de poder y su desprecio hacia el Legislativo: “Dice que va a vetar el aumento de 21.000 pesos a los jubilados, incluso si lo aprueba el Congreso. Es un perverso. Rebaja el impuesto a los bienes personales y ajusta sobre los más vulnerables. Esto es un genocidio por goteo”.
En cuanto al rol del Poder Judicial, el constitucionalista propuso una reforma estructural. “Hay que ampliar el Consejo de la Magistratura con participación de la sociedad civil, limitar los mandatos de los jueces de la Corte a seis años, y terminar con privilegios como sueldos millonarios sin pagar Ganancias. La Justicia debe responder ante la sociedad”.
Sobre posibles caminos institucionales, sostuvo: “Se está discutiendo ampliar la Corte a siete o nueve miembros. Si logramos nombrar una mayoría, podemos neutralizar a los actuales. Pero todo esto requiere poder político y presión ciudadana”.
Por último, criticó a dirigentes políticos que, según él, “son cómplices por acción u omisión”, mencionando a Luis Juez, Rodrigo de Loredo y Gabriel Bornoroni. “Acá no alcanza con indignarse con Milei. Hay que nombrar con nombre y apellido a quienes sostienen este modelo”.
Rodríguez Villafañe concluyó con una advertencia: “El Poder Judicial es el único que no se reformó desde la Constitución del ’94. O lo cambiamos o seguiremos en manos de una cúpula que se autoprotege, se enriquece y deja sin derechos a millones. El pescado se pudre por la cabeza”.
