Una cooperativa de trabajo integrada mayoritariamente por mujeres participa activamente en las tareas de búsqueda y recuperación de restos humanos en el ex centro clandestino de detención La Perla, en Córdoba, en articulación con el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF). Se trata de la cooperativa Roby Santucho, que colaboró específicamente en los trabajos realizados en el sector conocido como Loma del Torito, en el marco de una investigación judicial impulsada también por familiares de víctimas del terrorismo de Estado.
La labor de la cooperativa fue posible a partir de una convocatoria del municipio. “Fuimos convocadas por parte de la municipalidad de Córdoba. Como cooperativa social, para nosotras fue algo muy lindo que nos tuvieran en cuenta”, explicó a VillaNos Radio Lourdes Noriega, trabajadora de la cooperativa y responsable de la cuadrilla que participó de las tareas.
Antes de comenzar, las trabajadoras recibieron una capacitación por parte del EAAF. “Tuvimos una charla con el equipo donde se nos explicaba la importancia de este trabajo, que había que tener mucho ojo y nos daban todos los pasos a seguir”, relató Noriega. La cuadrilla se encargó de tareas como el rastrillaje del terreno y el posterior uso de zarandas para el filtrado de tierra y piedras.
Según explicó, el método del zarandeo fue clave: “Con el rastrillaje hay fragmentos tan pequeños que se pueden pasar; en cambio con la zaranda dio muy buenos resultados”.
La cuadrilla quedó finalmente conformada por cinco mujeres. “Después de la primera semana decidimos que la cuadrilla se conforme por cinco mujeres, y nosotras llevamos adelante todo el proceso del trabajo”, señaló.
El contacto directo con el lugar y con los restos óseos generó un fuerte impacto emocional en las trabajadoras. “Desde el primer día fue una mezcla de sensaciones: tristeza por saber a dónde terminaron desaparecidos, y mucha emoción por saber que estábamos dispuestas a excavar dentro de lo que ha sido la historia”, expresó Noriega.
Para muchas fue la primera vez en La Perla. “En mi caso nunca había ido. Poder formar parte, conocer y por primera vez ir a La Perla me deja una experiencia muy linda y también nos abrió más la cabeza”, afirmó.
Derechos humanos, trabajo y organización
La cooperativa lleva el nombre de Roberto Santucho, dirigente revolucionario desaparecido durante la dictadura. Consultada sobre el significado, Noriega sostuvo: “Ese nombre es nuestra humilde expresión de organización y lucha. Roberto Santucho fue uno de los militantes y cuadros políticos más importantes que tuvo la Argentina, y para nosotras es un orgullo llevar su nombre”.



Las tareas en La Perla finalizaron hace algunas semanas, aunque podrían retomarse el próximo año. Mientras tanto, la cooperativa continúa desarrollando múltiples actividades productivas, entre ellas construcción, textil, carpintería, herrería, limpieza y gastronomía, además de proyectos educativos.
Noriega también destacó el impacto personal de la organización cooperativa en su vida: “Nunca pude terminar la primaria y lo primero que hice al organizarme fue terminarla acá. Empecé a tener una vida más social, y eso es muy gratificante”. Y concluyó: “Hoy poder tener un trabajo digno es un orgullo”.
La experiencia de la cooperativa Roby Santucho se suma así a las múltiples iniciativas que, desde distintos espacios, aportan a la construcción de memoria, verdad y justicia en la Argentina.
