La COOPI: 62 años de trabajo cooperativo y servicio a la comunidad 

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La Cooperativa Integral celebró el 5 de junio 62 años de trabajo cooperativo y comunitario. 62 años de lucha por la ampliación de derechos, desarrollados con compromiso, osadía y rebeldía. 

En un contexto de profunda tensión con el gobierno de Esteban Avilés tras la quita del servicio de cloacas, el aniversario se volvió no solo una jornada de celebración, sino también de memoria, reflexión y denuncia.

Alejandro “Tati” Eguiguren, exgerente general y referente histórico de la institución dialogó con VillaNos Radio y  trazó un recorrido histórico por las luchas, avances y amenazas que marcaron la vida de la institución.

La COOPI nació un 5 de junio de 1963, en un contexto de movilización popular para dar respuesta a una crisis de servicios que el Estado municipal no resolvía. Era una cooperativa con una mirada amplia, no solo de agua, también de cloacas, gas, teléfonos, viviendas. Una verdadera construcción comunitaria que trascendió ideologías”, rememoró Eguiguren.

La fecha, sin embargo, coincidió este año con un acto impulsado por el municipio para reinaugurar la planta de cloacas, lo que Eguiguren interpretó como una “provocación calculada” y una “apropiación simbólica del legado cooperativo”.

Hoy, desgraciadamente, la gestión de la crueldad de Carlos Paz utiliza esta fecha para simular una supuesta recuperación del servicio. Es una agresión innecesaria. El que gana no humilla al otro. Esto no es grandeza, es mezquindad”, denunció.

El dirigente apuntó a una avanzada sistemática contra la cooperativa que, según dijo, se inició en la década del ’80 con la presión de grandes constructoras y se intensificó en los últimos años. Recordó que la COOPI resistió la privatización de las cloacas impulsada por las empresas Benito Roggio y Bechtel, y que logró construir obras fundamentales con recursos propios.

“La COOPI construyó por administración una planta potabilizadora única, un acueducto de 14 kilómetros, renovó cañerías cruzando el río con tecnología propia. Esto fue posible gracias a la organización de los trabajadores y a una dirección política comprometida”, explicó Egiguren. “Era un mal ejemplo: una empresa pequeña, sin fines de lucro, que demostraba que se podían hacer las cosas bien”.

También recordó la pelea por el gas natural y la conformación de una sociedad mixta con el municipio, boicoteada desde dentro por los propios funcionarios locales. “Nos enfrentamos a una comunidad de negocios que se arman entre grupos económicos concentrados y los gobiernos. Y lo hicimos con una empresita mínima, pero con vocación de servicio y de justicia social”, apuntó.

La actual coyuntura, marcada por el desfinanciamiento, la falta de actualización tarifaria y la quita de servicios, es leída como parte de esa misma ofensiva. “Avilés no nos da tarifa ni por agua ni por cloacas, nos quita la posibilidad de cobrar obras y lanza campañas contra la capitalización de la cooperativa. Pero esto no es solo una agresión a la COOPI, es una agresión a la comunidad”, sostuvo Eguiguren.

A pesar del contexto, el referente se mostró optimista: “El balance es extraordinario. Esta institución ha sembrado conciencia, obra pública, trabajo digno. Por eso, frente al intento de destruir lo que construimos, tenemos que reconvertir la bronca en memoria activa. Cada agresión es un reconocimiento a todo lo construido”.

Y concluyó con un mensaje para las nuevas generaciones: “No hay que perder la osadía, la mirada grande. No fuimos una cooperativa chiquita que gestiona la pobreza. Fuimos y somos una herramienta de transformación. Eso es lo que les molesta, y eso es lo que tenemos que defender”.

Innovación y construcción comunitaria

La celebración de los 62 años de la COOPI se concretó con un acto cargado de sentido institucional y comunitario, que marca el inicio de una nueva etapa orientada a la diversificación de servicios, la innovación cooperativa y la apuesta por el trabajo solidario.

La ceremonia tuvo lugar en la sede central de la entidad, con la participación de trabajadorxs y jubiladxs, quienes fueron reconocidos por su trayectoria. El evento contó con palabras del gerente General, Rodolfo Frizza, quien repasó los orígenes de la cooperativa y presentó las nuevas líneas de acción.

“No es un aniversario común, pero sí es una oportunidad para mirar hacia atrás, reconocer errores y capitalizar lo que está en las raíces más profundas de la COOPI: el servicio a la comunidad. Y también para mirar hacia el futuro”, expresó Frizza a La Jornada.

Durante el acto se anunciaron iniciativas que reflejan la evolución de la COOPI hacia una cooperativa moderna y territorialmente comprometida. 

Entre los proyectos destacados se encuentra la ampliación del servicio de internet por fibra óptica en el sur de Punilla bajo la marca Conectados, que incluye además una plataforma de contenidos audiovisuales en alianza con Colsecor y el grupo cooperativo Sensa.

También se lanzó el sistema cloacal domiciliario Biodep, una solución pensada para viviendas no conectadas a redes centrales, y se fortaleció el rol de la mutual Floreal Gorini, que brinda cobertura médica de emergencias, consultorios en San Antonio y próximamente en Villa Carlos Paz, además de convenios con farmacias y descuentos en medicamentos a través del programa Prever.

Frizza subrayó además el desarrollo de un servicio de cuidadores domiciliarios cooperativos en conjunto con la cooperativa Cuidarte Bien, así como el crecimiento del programa Constructiva, que ofrece transporte de agua, movimiento de suelo y alquiler de maquinaria pesada.

“Todo esto es un primer brote de tanta semilla enterrada. Desde 1986 apostamos a la transformación social a través del cooperativismo, no solo a la prestación de servicios”, afirmó el gerente general.

Una vocación intacta de servicio

En su intervención, Frizza destacó que, más allá de los cambios recientes, el espíritu de servicio sigue siendo el motor de la institución. “El desafío es mirar las necesidades actuales y dar respuestas. Desde acceso a medicamentos hasta conectividad en zonas donde sigue siendo una necesidad. Incluso con servicios que no siempre están tan visibilizados, como el cuidado de personas mayores”, indicó.

Asimismo, remarcó el trabajo conjunto con comunas como Cuesta Blanca (recientemente se firmó el contrato de concesión por el servicio de agua y construcción de obras relacionadas por 10 años con opción de renovación a 10 años más), y la posibilidad de proyectar la experiencia cooperativa en otras localidades de la provincia, en articulación con ministerios provinciales.

Se trató del primer aniversario tras la reciente quita del servicio de cloacas, sumado a la del agua en 2021. Justamente, el mismo 5 de junio, el municipio realizó un acto por el servicio de cloacas, donde el intendente volvió a lanzar críticas contra la COOPI.

A los únicos que respondemos es a la comunidad. Cuando alguien viene acá, encuentra una respuesta. Siempre va a haber una mirada para recoger la mirada del otro, y una palabra para responder la palabra del otro”, expresó Frizza, sin confrontar.

“Estamos festejando 62 años de construir comunidad”

Uno de los momentos más emotivos del acto fue el reconocimiento a trabajadorxs que cumplieron su ciclo laboral. Entre ellas, Fernanda Eguiguren, recientemente jubilada, quien compartió una sentida reflexión resumida en esta frase: “Nos miro y siento mucho orgullo por esta historia colectiva”.

El cierre estuvo a cargo del propio Frizza, con una frase que sintetizó el espíritu del encuentro: “La COOPI es un lugar para construir comunidad. Gracias a todos y todas quienes están presentes hoy aquí, porque estamos festejando 62 años de construir comunidad en base al esfuerzo y el compromiso solidario”.

A 62 años de su fundación, la COOPI reafirma que el cooperativismo sigue siendo una herramienta viva, capaz de adaptarse a los nuevos tiempos sin perder de vista su misión solidaria y transformadora.