(Foto: BambaCoop) La avenida Cárcano fue escenario de un nuevo siniestro vial con consecuencias fatales para un joven. El hecho ocurrió el viernes 4 de febrero aproximadamente a las 22:30 en la intersección con calle Atenas. Allí colisionaron un Volkswagen Crossfox con una motocicleta Yamaha YBR 125cc.
De acuerdo al parte policial, el auto era conducido por una mujer de 26 años, quien manifestó que venía circulando por avenida Cárcano y que, pasando el semáforo en la esquina con Atenas, “se le cruza una motocicleta Yamaha YBR 125cc con su conductor a bordo golpeando en el parabrisas”.
Como consecuencia de las lesiones, el motociclista falleció en el acto. El joven fue identificado como Agustín Quevedo de 20 años. El deceso fue constatado en el lugar por el servicio de emergencias.
Desde la ONG Concientizar para Prevenir lamentaron lo sucedido e insistieron en la necesidad de reforzar la educación vial, los controles y sanciones para evitar siniestros viales.
“Tenemos una sensación de impotencia. En abril vamos a cumplir 14 años de actividades donde hemos solicitado muchas audiencias. En algunas fuimos recibidos y en otras no. Ya desde 2015 el municipio no recibe nuestro pedido de audiencias. Aun así, hemos seguido enviando notas sobre temas referidos a la seguridad vial y la prevención del alcohol al volante y en menores. La avenida Cárcano y la Ruta 38 son lugares críticos de siniestralidad. En la avenida Cárcano ha sido más de una vez evidenciada el alto riesgo que hay”, expresó a VillaNos Radio María Teresa Cedrola, representante de la ONG.
En esa línea consideró que “con solo mirar desde la vereda un rato se ve la cantidad de infracciones que se cometen”.
“Falta educación vial en forma permanente, desde el nivel inicial. Eso no esta en forma sistemática brindado. Por otro lado: controles y sanciones. Para eso se necesita la cantidad de personal adecuado y capacitado como corresponde, para poder detectar a la persona que está cometiendo la infracción y sancionarla”, indicó.
También hizo referencia a la deficiencia en la infraestructura urbana. En este sentido mencionó que en la ciudad existe cartelería que está lavada, semáforos que quedaron obsoletos o que requieren de un refuerzo con el semáforo peatonal.
“Hay mucho trabajo para hacer”, insistió y agregó: “La Cárcano tiene una gran siniestralidad. En algunos lugares no hay veredas. Hay que hacer un trabajo arduo y gestionando ante la provincia. Vemos con impotencia que no se trabaje para el desarrollo”.
Desde el 2015 la ONG no es recibida por el gobierno municipal para abordar la problemática de la siniestralidad vial. Cedrola dijo que esa situación dificulta emprender un trabajo de concientización y de prevención de accidentes de tránsito. “Sin diálogo no se puede planificar si definir proyectos. Te limita la posibilidad de crecer y de tener expectativas sobre las distintas ramas donde se puede trabajar. Fuimos recibidos por el nuevo defensor del Pueblo, tal como sucedió con sus antecesores. Tenemos la esperanza de poder hacer algo con ellos, aunque todavía no sabemos si eso se concretará”, expresó.
Y añadió: “Con las autoridades municipales no podemos hablar. Con el doctor Darío Zeino, que nos conoce desde hace tantos años y que en su momento dialogamos bastante, no nos ha hecho una devolución sobre la audiencia solicitada. Ni hablar del intendente. Hay un campo abierto de trabajo, pero sin diálogo no se puede avanzar”.
¿Y el Observatorio Vial?
En noviembre de 2015 el gobierno municipal anunció la puesta en funcionamiento del Observatorio Vial. Entre los objetivos de este organismo se planteaba “intentar disminuir la accidentología vial a partir de prácticas de prevención y con un seguimiento de las diferentes situaciones de riesgo que provocan siniestros”.
Las tareas que pretendía asumir este observatorio se mencionaban la “implementación de cursos de educación vial en todos los niveles educativos, relevamiento de sectores de áreas conflictivas en la ciudad que puedan ser causantes de accidentes, elaboración de señalización uniforme al igual que la demarcación y colocación de diferentes dispositivos viales tendientes a mitigar y reducir la siniestralidad vial”.
Desde Concientizar para Prevenir advirtieron que desde enero de 2020 no vienen recibiendo datos estadísticos sobre siniestralidad vial.
“No entendemos cual es el control que se está haciendo sobre la siniestralidad en la ciudad. Tampoco se dan explicaciones. El Observatorio se puso en funcionamiento a través de un convenio con la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Esto pone en duda también los números que brinda la Agencia, porque si acá no está funcionando el observatorio y esto sucede en otras partes del país, ¿Cuál es el numero real o aproximado a lo real de los siniestros en Argentina tanto muertos como lesionados? Hay un campo abierto ahí”, manifestó.
Cedrola reiteró que los últimos datos recibidos corresponden a diciembre de 2019. “Si había alguna demora en la entrega de datos, en su momento hablábamos con Federico Blázquez que era la persona que estaba a cargo y él lo enviaba. Después apareció la pandemia y ahí decidimos, cautelosamente, esperar.
“Luego solicitamos audiencia y lamentablemente nos dijeron que el personal con el que contaba el área no era suficiente y que estaba yendo a trabajar martes y jueves. Allí también nos dijeron que cuando se pusieran en práctica nuevamente las estadísticas, nos las iban enviar. Hasta ahora nunca más las enviaron. Nosotros hacemos el seguimiento y vemos por los medios que tampoco se informa. Es lamentable, pero no tenemos registro actual”, advirtió.
Recordó, además, que en los datos estadísticos difundidos desde el Observatorio Vial se incluía también las referencias a la cantidad de controles de alcoholemia. “Eso es un punto clave -subrayó la referente de Concientizar para Prevenir-. La ordenanza habla de un control de alcoholemia por semana, lo cual es poco.
“Hemos solicitado que se reactiven los controles, que sean sorpresivos. Hay una carencia importante en este sentido. Creo que la sociedad en general tiene que sumarse a los reclamos y seguir insistiendo. Si lo hacemos unilateralmente, no alcanza. Somos una asociación que trabaja desde la convicción, pero también tenemos un límite”.