Así comienza una crónica del horror que está viviendo la comunidad de Paravachasca desde hace una semana. El martes 5 de enero desapareció Marcia Acuña, una adolescente de 16 años que hace poco tiempo residía en la comuna de Villa San Isidro junto a su tía que se percató de su ausencia a la madrugada.
Luego de cinco días de una intensa búsqueda encabezada por organismos públicos con un fuerte protagonismo de la ciudadanía y diferentes organizaciones del Valle de Paravachasca, Marcia fue encontrada sin vida en la tarde de este sábado 9 de enero. Su cuerpo fue hallado en la zona de José de la Quintana, luego de que se encontrara al perro que acompañaba a la joven.
Durante toda la semana los rastrillajes se enfocaron en la zona de San Isidro y José de la Quintana, ya que diversos testimonios advirtieron haberla visto en el sector.
En el operativo de este sábado que comenzó a las 7 de la mañana participó con personal de la Policía de Córdoba, DUAR, Bomberos Voluntarios de la Regional 7, Defensa Civil, el Grupo K9 de canes adiestrados, drones, un helicóptero y vehículos especiales, según especificó la policía Departamental Santa María.
También, cada día decenas de vecines se incorporaron a los rastrillajes asumiendo un rol clave para impulsar la búsqueda. Por otro lado, a través de un convenio que existe entre Provincia y Nación, se sumó la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas y el sistema nacional de personas desaparecidas y extraviadas.
A partir de la confirmación del fiscal a cargo de la causa, Dr. Diego Fernández, se ordenó inmediatamente la realización de la autopsia para determinar las causas del deceso. Recién se esperan resultados preliminares para mediados de semana.
El Ministerio Público Fiscal emitió un comunicado informando que el cuerpo fue hallado aproximadamente a las 18.40 horas, “sin vida ni signos aparentes de violencia externa por el equipo de búsqueda y rescate de la policía e investigadores abocados al caso y que estaban realizando el rastrillaje”. El organismo aseguró que “se ha demarcado con cordón perimetral el sector para preservar inalterable el lugar, a efectos que un equipo científico de policía judicial realice el relevamiento criminalístico”.
La organización de “Trabajadores unidos por la tierra” (Traut) fue una de las más activas en la búsqueda de Marcia. Traut recuperó el predio del batallón 141 en José de la Quintana, allí desarrollan un proyecto de agroecología comunitaria.
Asimismo, están trabajando en un espacio para transformarlo en una casa refugio para niñes y mujeres en situación de violencia. En el lugar funcionó un centro de clandestino de secuestros, torturas y muertes desde principios de 1976.
“El rastrillaje del territorio tuvo su epicentro en el predio. Fue uno de los lugares donde se buscó más arduamente. La búsqueda fue realizada en un 99% por vecinos de pueblos cercanos. Empezamos a reclamar, porque había una joven desaparecida y se trataba con un nivel de indiferencia la búsqueda. Nos sostienen las redes comunitarias y nos tocó hacer ese reclamo”, expresó Mercedes Ferrero, quien es parte de Traut e integrante del Refugio Libertad, ex Batallón 141.
A Traut se sumaron más de 40 organizaciones y movimientos sociales que reclamaron a las autoridades un “accionar rápido y efectivo” para dar con Marcia.
El martes alrededor de las 18 horas su tía recibió una serie de seis mensajes de texto desde el celular de Marcia (aún no se precisó si fueron enviados por ella), que decían lo siguiente: “Tía”, “Estoy en a.m.p.e.d.q”, “pensé que estaba soñando”, “Tengo miedo”, “Parece ser q fue un campamento, hay edificios con ruinas”, “nunca estuve acá”.
A partir de este dato, el operativo de búsqueda se concentró en la zona de la ex Fábrica Militar, ya que unas siglas similares que se mencionan en los mensajes coinciden con las que se encuentran al ingreso del predio. Desde ese momento su celular permaneció activo hasta el miércoles inclusive, según lo confirmado por fuentes judiciales a La Nueva Mañana.
El terreno de 900 hectáreas se recorrió día y noche arduamente. Finalmente, Marcia “aparece 5 días después en una zona que había sido rastrillada varias veces. Una zona cercana a una bomba de agua donde trabajadores de la cooperativa van a controlar y muy cercana al centro de José de la Quintana”, explicó Ferrero.
Tristeza, furia y conmoción generó el hallazgo del cuerpo sin vida de la joven en los habitantes de los pueblos cercanos y dejó al descubierto la compleja situación en la que se encuentran niños, niñas y adolescentes en la región.
Mientras tanto, la muerte de la adolescente continúa en investigación, ya que aún no está disponible el resultado de la autopsia. “No se puede sacar ninguna conclusión apresurada antes de la autopsia. El accionar estatal fue poco tardío ineficiente. Hoy tenemos una piba menos”, sentenció.
En las múltiples hipótesis que manejó la investigación por la desaparición de Marcia se encontraba la trata de personas, debido a una denuncia similar que su tía efectuó el año pasado por una hermana más grande de la joven que había alcanzado la mayoría de edad. Finalmente, fue encontrada un tiempo después en Sierras Chicas en la vivienda de un hombre de más de 60 años, que le daba dinero y comida, según informó el portal La Nueva Mañana.
En memoria de Marcia
Todo lo sucedido ha desnudado una trama de abandono por parte del Estado a les jóvenes que los deja expuestos a múltiples violencias y que implica una vulneración sistemática de derechos. Como respuesta comunitaria se impulsó una marcha frente a la sede comunal de Villa San Isidro. Luego se dirigió hasta la “Plaza de los Niños”, donde se hizo una intervención con carteles y se compartieron algunas expresiones.
“Fue una movilización bastante linda en cuanto a su participación y a la manifestación de unidad entre vecinos en un momento de absoluto dolor y tristeza. Siempre es reconfortante saber que existe la posibilidad de estar juntos en estas circunstancias”, rescató.
Y puntualizó que el objetivo fue “mantener viva la memoria de Marcia, recordar su vida, su historia, sus afectos. Denunciar la insuficiencia de la acción estatal y haciendo una reflexión colectiva de que es lo que nos está pasando como pueblos rurales del interior de la provincia de Córdoba”.
La vulneración de derechos a nivel tan extremo puso a la comunidad en acción, ya que se considera que no hubo instancias de acompañamiento, la escucha y cuidado adecuado en este caso. Queda expuesto, de esta manera, un problema estructural de abandono por parte del Estado, sumado a la falta de dispositivos y herramientas para abordar las múltiples formas de violencia a las que están expuestas las adolescencias y las infancias.
“Hay situaciones de violencia hacia niñes, que incluye la violencia sexual, y nos toca como comunidades abordarlas. Nos toca romper el silencio y movilizarnos en torno eso, para que nunca más se den situaciones como ésta. Las herramientas que podrían acompañar esta situación no estuvieron”, advirtió Ferrero y subrayó que se han conocido otros casos de vulneración de derechos en la región.
“Hay organizaciones de mujeres que aportaron datos fundamentales a la causa con la posibilidad de desarmar redes mafiosas que exponen a los niños acá y en la ciudad de Córdoba. Queremos que se tome en cuenta esa información”, aseguró Ferrero.
El Consejo de niñez y adolescencia, cuya conformación fue promovida por la comuna de Villa San Isidro, se comprometió a trabajar más fuertemente en el tema y en esta situación, “pero lo cierto es que no hubo una respuesta concreta ni de parte del gobierno provincial ni de las instituciones que actúan a nivel local”, agregó.
Vigilia para acompañar
Mañana se realizará una vigilia a las 19 horas en el lugar en el que fue hallada la adolescente, como una manera de acompañar a sus pares y de seguir mostrando que la sociedad de Paravachasca continúa movilizada y sostiene el reclamo por justicia y políticas públicas para la juventud.
“Es una instancia de despedida y de empezar a definir de manera conjunta. A partir de este golpe muy duro, empezar a dialogar más sobre como seguimos de aquí para adelante”, especificó Ferrero sobre la demanda ciudadana de intervención estatal en la contención de les jóvenes de la comunidad.