Después de intentar sostener el proyecto por todas las vías, finalmente el hostel del Albergo Ético Argentina cerró sus puertas. La pandemia y la falta de apoyos por parte de los diferentes gobiernos (municipal, provincial y nacional) tornaron imposible mantener abierto este emprendimiento turístico gestionado por personas con discapacidad.
Al día de hoy eran 11 lxs jóvenes que formaban parte de la propuesta. Uno de ellos es Juan Carlos, de 30 años. Su mamá, Elvia Mella, dialogó con VillaNos Radio y sostuvo que “se puso todo para continuar, pero esta pandemia arrasó con la economía”.
“Los chicos no pudieron seguir haciendo su trabajo y hoy no podemos pagar el alquiler, los gastos mensuales y nos quedamos sin espacio. A lo largo de la pandemia no pudimos abrir ni un día, porque los chicos son grupo de riesgo y la prioridad es la salud. Era impensable que pudieran atender al público”, expresó.
La mujer ratificó que ningún gobierno realizó un aporte para mantener el hostel hasta tanto dure la pandemia. “El hostel siempre estuvo autogestionado por los chicos. Ellos hacán el trabajo y es lo que permitía el ingreso de dinero. También hubo padres y amigos que hicieron su aporte para que esto siguiera funcionando. Del Estado no recibimos nada”, dijo.
Vale recordar que el proyecto tiene como objetivo trabajar por la inclusión, la autonomía y la autosuficiencia personal y económica de personas con discapacidad a través del aprendizaje del oficio hotelero-gastronómico.
“Hoy Juan está muy mal, como todos los chicos. Él tiene 30 años y vivió una vida de sobreprotección absoluta, que ese fue mi gran error. Hasta que conocí a Lucía que me abrió los ojos. Me habló de todo lo que puede Juan. Con hechos, lo fui viviendo todos los días. Juan aprendió a tender a una cama, a prepararse un café, a servir una mesa. Aprendió a tomarse el colectivo y viajar solo. Iba al hostel a trabajar todos los días, a horario y se preparaba su ropa”, describió la mujer.
Y remarcó: “Cuesta decir que esto se terminó. Es lamentable, realmente”.
El proyecto del Albergo Ético desembarcó en Villa Carlos Paz en el año 2017, de la mano de la fundación Unidos por la Inclusión Social (UPIS) que lidera Lucía Torres. La intención fue poder replicar la experiencia que desde años se mantiene en Asti (Italia). El embajador del proyecto, Mauro Dagna, estuvo varias veces en nuestra ciudad. Tras estar funcionando unos meses en el Hotel El Cid, en marzo de 2019 el Albergo Ético dio un paso más impulsando un hostel ubicado en barrio Costa Azul Norte. La experiencia de Villa Carlos Paz era la segunda en el mundo.