A través de un comunicado, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) denunció que las autoridades municipales en coordinación con sus pares provinciales han resuelto modificar el estatus del hospital municipal Gumersindo Sayago para transformarlo en un hospital Covid “dada la falta urgente de camas de atención de pacientes con esa patología, algo que las autoridades municipales se habían negado asumir durante toda la pandemia, ignorando los reclamos de las y los trabajadores para adoptar las medidas necesarias para dicha atención”.
“Ahora, con pacientes internados en la UTI (Unidad de Terapia Intensiva) con respiradores y atención permanente, no como pacientes de paso para un centro de internación definitivo hasta el alta, resurgen los problemas para llevar a cabo la correcta atención de los pacientes y preservar la salud de las y los trabajadores”, advirtieron desde el gremio.
Julia Giuliani, secretaria de prensa de ATE Córdoba sostuvo que desde el comienzo de la pandemia el hospital Sayago atiende a personas con coronavirus. “Si bien las autoridades lo negaban, las y los trabajadores de los equipos de salud vienen atendiendo a personas que llegan con COVID o con síntomas de tenerlo, desde el inicio de la pandemia. En el marco del desborde que hay a nivel provincial y con el cupo cubierto de camas en el Funes hace que muchos casos sean tratados en el mismo Sayago”, afirmó en diálogo con VillaNos Radio.
Y precisó: “Hay personas que tienen COVID y están quedando internadas en el hospital, incluso en terapia intensiva e intubadas. No están dadas las condiciones edilicias ni de capación en torno al cuidado personal para los equipos de salud”.
La dirigente recordó que en febrero pasado se presentó el informe elaborado por el departamento de Salud Laboral del Consejo Directivo Provincial de ATE Córdoba. Allí se dejó constancia de que la UTI (Unidad de Terapia Intensiva) tiene un grave problema de ventilación.
“Carece de ventilación central y la única manera de realizar la ventilación necesaria es dejando abierta la puerta de misma UTI, eso sí, tapada con un biombo para evitar que se vea hacia dentro. Con el agravante que del otro lado de la puerta se encuentra el lugar donde concurren a hacer los testeos de Covid la gente que llega desde la calle. Así, mientras los pacientes internados pueden tomar contacto con el exterior, quienes van a testearse al Sayago se exponen al contagio”, denunciaron desde el gremio.
Vale recordar que, en el largo informe sobre el estado del hospital, presentado oportunamente al intendente Daniel Gómez Gesteira, “no se verificó en el Sayago la presencia de Servicio de Higiene y Seguridad ni Servicio de Medicina del Trabajo, no se realizan los Exámenes Periódicos al Personal ni se verifica la entrega por parte del empleador a la ART, del Relevamiento de Agentes de Riesgo Causantes de Enfermedad Profesional, para orientar la realización de los exámenes mencionados”. Tampoco se realizaban testeos Covid-19 al personal.
Renuncias. El gremio también expresó su preocupación por la continuidad del “desmantelamiento” del sistema de salud municipal en Villa Carlos Paz. Al largo conflicto con el personal y las serias deficiencias en infraestructura se sumó en los últimos días la renuncia de dos médicos clínicos y tres enfermeras.
La situación se torna aún más grave porque estos alejamientos se dan en momento en el que el Gumersindo Sayago se transformó en un hospital Covid, y aun no fueron reemplazados.