Alberto Santillán, el papá de Darío Santillán, una de las víctimas de la Masacre de Avellaneda, repudió la decisión de la Cámara de Apelación y Garantías en lo Penal N° 3, a cargo del Juez Martín García Díaz, que ordenó liberar al cabo Alejandro Acosta, uno de los asesinos de su hijo.
Vale recordar que el 26 de junio de 2002, dentro de la Estación Avellaneda, policías bonaerenses ejecutaron a Darío Santillán por la espalda y a corta distancia. Darío acompañaba a Maximiliano Kosteki, que agonizaba víctima de un disparo policial que había recibido mientras participaba de la protesta.
“No veo el motivo por el cual le dieron la libertad, porque a 22 años y cuatro meses nosotros todavía estamos buscando justicia. Nosotros no tenemos una justicia plena”, dijo Santillán en diálogo con VillaNos Radio.
Recordemos que tras el asesinato de Maximiliano Kosteki (22) y Darío Santillán (21), la policía montó una escena para encubrir los crímenes. Levantaron las evidencias, corrieron los cuerpos e intentaron instalar una versión oficial falsa: que los jóvenes piqueteros habían sido víctimas de una pelea entre organizaciones.
La versión del encubrimiento se sostuvo por más de un día en el discurso de policías y autoridades. Sin embargo, dos reporteros gráficos -Pepe Mateos y Sergio Kowalewski- habían fotografiado de cerca los hechos en la estación. Cuando salieron en los medios, las imágenes no dejaron dudas: el comisario bonaerense a cargo del operativo, Alfredo Fanchiotti, junto al cabo Alejandro Acosta, habían ejecutado fríamente y por la espalda a Santillán, que se había quedado en la estación para asistir a Kosteki y el grupo de policías había intentado encubrir todo.
Tanto Acosta como Fanchiotti fueron condenados a reclusión perpetua en 2006 tras ser encontrados culpables de doble homicidio agravado por alevosía y siete tentativas de asesinato. Ahora la Sala III de esa Cámara -integrada por Martín García Díaz, Tomás Bravo y Miguel Alberdi- dispone la libertad condicional de uno de los condenados. “La justicia no nos da lo que realmente merecemos y exigimos”, dijo Santillán y no descarta que también se busque liberar a Fanchiotti.
Santillán dijo que tienen la firme decisión de apelar esta resolución. “A esta altura, no me conformo con que sea una condena social. Quiero que esto sea una condena efectiva. Y que no termine únicamente con ellos, sino que no olvidemos a los responsables políticos de la Masacre de Avellaneda. Estoy hablando de Eduardo Duhalde, Felipe Solá y Aníbal Fernández”, recordó.
Y remarcó: “No nos tenemos que olvidar de toda esa clase de cosas. Tampoco tenemos que olvidarnos que Darío representa la vida. Darío representa la lucha, Darío representa el amor, porque para dar semejante lucha tiene que haber muchísimo amor por el otro”.