En la última reunión de directorio, el Ente Nacional de Comunicaciones decidió otorgar a la Cooperativa Integral la licencia oficial para el “funcionamiento y explotación de una estación de radiodifusión sonora” de frecuencia modulada.
Jorge Boido, coordinador de la radio y del área de Desarrollo Cultural y Extensión Comunitaria sostuvo que este reconocimiento llega en un momento crucial para la Cooperativa Integral. “VillaNos viene gestionando su licencia desde el año 2009 y todavía estaba el Comfer. El trámite allí sufrió daños. Incluso hubo robo de documentación y se cajoneó el expediente”, recordó.
En la misma línea mencionó que la apuesta de la COOPI en materia de comunicación era mucho más amplia al buscar ser prestadora del servicio de televisión por cable. Este proyecto se truncó tanto en 1993 (en el gobierno de Eduardo Conde) como en 2013 (en el gobierno de Esteban Avilés), cuando los gobiernos municipales no autorizaron a la institución el uso del espacio aéreo para la extensión del cableado.
“La decisión de Avilés de no permitir el uso del espacio aéreo a la COOPI ya respondía a un proyecto que ese gobierno ya venía realizando que era eliminar a la cooperativa. Ya venían con la idea de quitarle los servicios. Ya en 2012 había anunciado la quita de acciones en Carlos Paz Gas, era entendible que no iban a permitir que la COOPI desarrolle nada más y nada menos que un servicio de televisión por cable. Esa posibilidad se cercenó casi constituyendo la figura de una censura previa”, dijo.
Tras esa imposibilidad, la decisión de la COOPI fue seguir adelante e instalar una radio.
“Que los organismos oficiales le den la licencia a esta radio, además de la alegría que genera, tiene la importancia de que se reconoce la legalidad a una institución que en los últimos 10 años se la viene hostigando, acusándola de manejarse en la ilegalidad”, enfatizó. Además destacó que “VillaNos viene construyendo un vínculo con sus oyentes y con la ciudadanía y que eso la ha legitimado”.
“Esta licencia corona un derrotero de mucho trabajo y llega en un momento crucial para la cooperativa. La COOPI está con serias posibilidades de dejar de existir como tal. Etas corroboraciones ayudan a sobrellevar este momento de tanta pérdida”, expresó.
Sostuvo además que la perspectiva de los servicios públicos como un derecho humano que caracteriza a la COOPI se aplica también en la comunicación. “La comunicación la manejamos igual que el agua, entendiéndola como un servicio y como un derecho”, afirmó.
Boido también agradeció al diputado nacional Pablo Carro, presidente de la Comisión de Comunicaciones e Informática de la Cámara de Diputados, porque fue quien acompañó el reclamo y sus gestiones ayudaron a superar los obstáculos para alcanzar este reconocimiento legal. “Él se ha destacado por hacer un seguimiento férreo de ese proceso y de este trámite que tuvo todas estas complejidades. Eso demuestra que hay dirigentes que entienden a la política como el ejercicio de lo necesario y no solo de lo posible”.